La nueva oficina será la mejor adaptada.
Cuando hablamos de productividad, solemos tener en cuenta dos puntos esenciales: quién hace el trabajo y cómo lo hace; sin embargo, pocas veces damos importancia al lugar desde dónde lo hace.
Después de la emergencia sanitaria por COVID 19, la nueva oficina tendrá que convertirse en un espacio de trabajo cómodo y agradable para adaptarse tanto a las exigencias de higiene, como a sus requerimientos de productividad.
En Poliarte conocemos las necesidades primordiales a la hora de diseñar espacios de trabajo adecuados para conseguir una nueva oficina ante un mundo postpandemia, por lo que te compartimos los 5 elementos que vuelven a tu oficina productiva y que son imprescindibles.
- Crear espacios multifuncionales. Para aquellas actividades diversas, como reuniones o videoconferencias, o simplemente un área que permita adaptarse a cualquier necesidad. La productividad mejora significativamente cuando existen espacios polivalentes que permitan modificar con facilidad los elementos en función de distintos usos.
- Mobiliario ergonómico. Un estudio titulado “Resultados positivos de la ergonomía de la oficina en términos de mayor productividad”, publicado por la Revista de Ingeniería Gestión y Competitividad, dice que la productividad también está relacionada con la comodidad de los usuarios, por lo que una postura correcta y una superficie óptima para realizar tareas, son los mejores aliados para echar andar la creatividad.
- Buena iluminación. Los espacios de trabajo con luz natural o artificial suelen ser perfectos para la concentración y el rendimiento laboral. Y, por el contrario, aquellos que carecen de esto pueden provocar fatiga, desinterés o pérdida de concentración.
- Áreas de recreación o descanso. La nueva oficina también tiene que priorizar los espacios de esparcimiento entre las personas, promoviendo, siempre, la sana distancia. Un sitio donde pasar unos minutos agradables y fuera del ambiente ayuda a eliminar las tensiones.
- Temperatura adecuada. En estos momentos en los que la exigencia sanitaria así lo requiere, es esencial mantener una temperatura adecuada de todos los espacios de trabajo para evitar problemas respiratorios. Gracias a esto, la productividad podrá ser una realidad.
Sin duda alguna, la nueva oficina será aquella que tenga una mejor adaptación a las exigencias sanitarias, pero también aquella en la que prevalezca el bienestar mental y emocional de su talento humano, dotándolo de la mayor comodidad y de las herramientas correctas para alcanzar los objetivos previstos en cualquier proyecto.